Seamos honestos. ¿Eres capaz de guardar los Diez Mandamientos o estás consciente de romperlos persistentemente? Estas reglas pueden luchar contra el mal, pero no pueden erradicarlo por completo. Sigue siendo un hecho que los humanos no estamos libres del mal y que no somos capaces de cambiar nosotros mismos.

Es por eso que Dios habló de un tiempo en el que habrá una nueva forma de vida. Pero algunas cosas deben cambiar para que eso suceda:

1. Cuando los humanos decidimos contra Dios y elegimos seguir a la serpiente, tuvimos que abandonar el jardín y luego la relación cercana con Dios. Hemos pecado contra Dios y no podemos revertirlo. Pero debido a que Dios nos ama tanto, anunció que perdonará nuestros pecados. Ese es el requisito más importante para obtener el tipo de relación que tuvieron los primeros humanos con Dios.
2. Dios necesita cambiar nuestro corazón para que ya no estemos bajo la influencia del mal y podamos elegir libremente entre Dios y la serpiente (maldad). Si elegimos a Dios y luego lo que es bueno, las reglas de Dios se aplicarán nuevamente a nosotros, pero si elegimos escuchar a la serpiente caeremos nuevamente bajo la influencia del mal. Pero para que podamos tomar esa decisión, primero necesitamos conocer a Dios (llegar a conocerlo). Entonces Dios habló de un tiempo en el que todos podrían conocerlo personalmente. Cuando podemos tener tal relación con Dios, ya no necesitamos seguir las reglas de un libro, sino que Dios escribirá Sus reglas directamente en nuestros corazones para que se convierta en una parte de nosotros.
3. Entonces, perteneceremos a su pueblo y Él será nuestro Dios y muchas cosas se convertirán en lo que Dios quiso que fueran en primer lugar.